sábado, junio 21, 2008

El tabaco y Karl Marx

Hace tiempo sabía que el tabaco afecta negativamente a la piel (sólo hay que ver la piel de quienes fuman). Sin embargo, reconozco que esta noticia ha sido un descubrimiento

EFE ELMUNDO.ES
MADRID.- El pensador alemán Carlos Marx (1818-1883), cuyas teorías dieron origen al socialismo y el comunismo, padecía una dolorosa enfermedad de la piel, la hidradenitis supurativa aguda, por fumar en exceso.

A esa conclusión han llegado los profesores de medicina alemanes Rudolf Happle y Arne König, de la Universidad de Marburg, que basan sus conclusiones en estudios clínicos e informes históricos sobre el autor de El Capital. La Universidad de Marburg ha informado de que ambos profesores consideran que "la enfermedad dermatológica del conocido padre de la doctrina comunista es un ejemplo ilustrativo de las graves consecuencias del consumo de tabaco". Carlos Marx sufrió durante años dolorosos abscesos y fístulas en las axilas y las ingles, así como alrededor del ano, señalan los expertos germanos en un estudio que publicará el mes próximo la revista 'British Journal of Dermatology' y que ha sido adelantado por su Facultad.

Esta enfermedad se produce por una inflamación de los folículos de un tipo de glándulas sudoríparas que se encuentran en la zona de las axilas e ingles, y también en el periné y mamas. A veces es suficiente drenar el pus para su solución, aunque muchos pacientes requieren un tratamiento con antibióticos. En ocasiones, el trastorno se hace crónico y aparecen úlceras y fístulas.

A juicio de los especialistas de Marburg esta enfermedad tuvo su origen en el elevado consumo de tabaco que tenía Marx, como lo demuestra un estudio realizado por Happle y König con pacientes que padecen esa enfermedad y de los que el 89% eran fumadores empedernidos.
De ese estudio, así como de otro similar realizado anteriormente y que ofreció resultados muy parecidos, los profesores de Marburg sacan la conclusión de que fumar es, "con elevada probabilidad, una de las causas fundamentales de la hidradenitis supurativa".

Cuidado con los timos

¡¡¡Mucho cuidado con Internet!!! Tenemos timo a la vista... Copio y pego de una noticia aparecida en el Diario El Mundo (21 de junio de 2008)

Le usurpan la identidad e intentan vender su vivienda a través de un portal de Internet

Actualizado viernes 20/06/2008 11:55 (CET)

JORGE SALIDO COBO
MADRID.- Busque la diferencia: "Se vende piso de 190 metros cuadrados en Puerta de Toledo (Madrid). Precio: 740.000 euros. Contactar con J.R.L.E.". "Se vende piso de 190 metros cuadrados en Puerta de Toledo (Madrid). Precio: 120.000 euros. Contactar con J.R.L.E.". Imagínese con qué cara se quedó el verdadero propietario de la casa cuando vio que su vivienda circulaba por Internet con un precio inferior de 620.000 euros al que él había marcado. Alguien le había usurpado la identidad y su piso estaba siendo objeto de una estafa. Más de 50 posibles compradores han contactado con J.R.L.E. y quizá más de uno puede haber pagado los 2.400 euros de señal que se les exigía.

"Hace seis u ocho meses colgué el anuncio en Internet e indiqué todas las características del inmueble con fotos incluidas. Puse mi correo electrónico, teléfono, nombre, apellidos, etc. De vez en cuando llamaba alguien para preguntar, pero todo cambió el lunes 9 de junio. Recibí una llamada de un chico que me dice que ha visto el anuncio en un portal diferente a donde yo lo había puesto y que costaba 120.000 euros. Al principio, creí que era un error. Pero mi gran sorpresa llegó un día después. Otro posible comprador se presentó en mi edificio diciéndome que había quedado con el vendedor del piso. Es decir, yo. Increíble", indica J.R.L.E., que prefiere omitir su nombre ya que todo el asunto está en manos de la policía aún. Le llamaremos Juan.

El propietario de la vivienda no dudó en llamar a la policía, que acudió de paisano para intentar cazar al timador. Tras este inesperado encuentro, Juan se dio cuenta de que algo muy raro estaba ocurriendo. El propietario de la vivienda no salía de su asombro y no dudó en llamar a la Policía, que acudió de paisano por si aparecía la persona que se había apropiado de su identidad. Nadie se pasó por ahí, pero el entramado estaba descubierto. Un hombre, al parecer extranjero, había recogido todos los datos del anuncio de venta de piso de Juan, incluido los personales, y los había volcado en un portal de Internet diferente con dos cambios sustanciales: un precio rebajadísimo y unas fotos más atractivas de otro inmueble que no tenía nada que ver con el que estaba a la venta.

"Un día vi el anuncio y me impresionó el precio del piso. Una amiga me animó a contactar por correo electrónico y pronto recibí la respuesta del supuesto dueño. Por su forma de expresarse deduje fácilmente que no era español", nos indica Alicia (también nombre ficticio), que se decanta por ocultar su verdadera identidad por miedo al estafador, que tiene sus datos. Ella descubrió que todo era un engaño después de que su novio se pasara por el piso y Juan le pusiera al tanto de lo que estaba ocurriendo.
Atrás quedaban varios correos electrónicos que habían despertado la ilusión de esta pareja por hacerse con el que podría ser el hogar de sus sueños. A continuación, puede leer un extracto de uno de los 'mails' que el timador mandó a Alicia después de que ésta mostrara su interés en la compra. "He visto que usted es interesado en comprar mi apartamento (...) Este apartamento es de mi papá, porque mi papá fue español, y mi madre es del Reino Unido, yo soy muy feliz que puedo hablar con usted en el idioma español (...) Desgraciadamente mi padre ha roto la relación (...) Ahora, este apartamento es mío (...) Yo no sé tanto lo que es el precio del apartamento en Madrid y para mí está bien venderlo para 120.000 euros (...)". Leer el intercambio de correos electrónicos completo entre el estafador y Alicia.

En apenas cuatro días, el anuncio de Internet había recibido más de 6.700 visitas y la casa de Juan se había convertido en poco menos que "una peregrinación a La Meca", como él nos describe. "Además, estoy convencido de que el propio estafador me ha llamado para conseguir más información de la casa", dice. A los interesados en comprar les han llegado contratos de compraventa ('Precontratos de Reservacion, Garantia, Deposito para Arras y Señal') desde una inmobiliaria inglesa que llevaban incluido un pago de reserva de 2.400 euros. "Si sólo ha picado uno de cada 1.000, el timador se ha embolsado más de 14.000 euros. Del medio centenar con los que yo he hablado, ninguno habría pagado nada", declara Juan.

La supuesta inmobiliaria londinense se encargaba de enviar a los compradores el documento de compraventa para que lo firmaran y lo remitieran. En éste, aparecían cláusulas como "Si usted no tiene gusto del apartamento, y usted no desea comprarlo después de que usted lo vea, usted recibirá su dinero 2400 EUR detrás en máxima 24 horas". Otro de los documentos reenviados, llamado 'Los detalles del pago' se indicaba a las víctimas directamente la dirección donde debían hacer el ingreso del dinero y al final rezaba "Si usted hara el pago hoy, nosotros haremos todos los arreglos para lunes".

"Hay algunos que han hablado con el estafador hasta por teléfono. Siempre en inglés", apunta el verdadero propietario. Juan no tardó en ponerse en contacto con los portales a través de los que se había realizado el timo, el inmobiliario y el de la cuenta de correo. El primero retiró rápidamente el anuncio falso y le pidió sus disculpas. El segundo aún no le ha dado señales de vida.

La solución a este problema es complicada. El vacío legal que existe en Internet es muy grande. "Esto no tiene ninguna solución. Aquí paz y después gloria. Si alguno ha hecho la transferencia bancaria que se dé por perdido. Podría denunciar ante la Policía o en el Juzgado por vía civil o penal, pero sólo podría obtener una sentencia condenatoria en el improbable caso que algún día identificasen y localizase al estafador. En este caso, ello no supone en absoluto que pueda recuperar la cantidad que le ha sido estafada", dice Juan, que es abogado y algo de todo esto sabe.
Ahora, sólo falta esperar y ver si la investigación policial da sus frutos. "Todos los implicados estamos colaborando activamente para que esto no vuelva a suceder", dice Juan, que ya ha interpuesto varias denuncias y espera que, a través de esta información, se eviten futuros timos de este tipo